El autor borgoñón Edgar Vollraig-Bleu ha sacado su espada ucronía sobre la guerra franco-española en el contexto de la guerra de los 30 años. Edgar Vollraig es un reputadísimo hispanista de la Sorbona, sus tesis muy favorables a la España de los austrias suelen provocar una intensa polvareda en el país vecino, donde se le tacha de anti francés y reaccionario por sus opiniones políticas.
Esta esperadísima novela, plasma sobre el papel lo que la historiografía francesa ha venido tildando de imposible y rebatido en todas las tésis académicas de Vollraig-Bleu. La acción se sitúa en el llamado año de Corbie; en que el ejército del Cardenal-Infante queda a las puertas de París. Desde aquí el autor inventa una nueva realidad en la que el hermano del rey Felipe IV desobedece las órdenes de Madrid avanzando sobre la capital francesa y tomándola con la colaboración popular atizada por una conspiración jesuítica.
La novela es un conjunto de conspiraciones y tramas cruzadas, donde se hace difícil distinguir a unos posibles buenos o malos y que conducen en las fases más narrativas del libro, con un muy aplomado toque rankiano, hacia una paz alternativa en Westfalia, el destronamiento de la casa de Borbón en Francia en favor del Cardenal-Infante y el hundimiento total de la causa protestante salvo en Escandinavia y las islas británicas.
La interesante tesis del libro choca con la falta de dinamismo de su prosa, espesa y de corte germánico en sus interminables párrafos. Las conspiraciones y giros argumentales se ralentizan en exceso por el excesivo afán descriptivo del autor que hace que las casí 4 mil páginas de la novela nos parezcan más una obra de referencia que un pasatiempo.
Con todos sus graves defectos formales y también conceptuales resulta de una belleza cansada el nacimiento de un nuevo orden europeo, de marcado carácter mediterraneo y en el que el capitalismo queda ahogado severamente bajo las riendas de una sociedad estamental con una rigurosa moral católica. Es un apogeo de Trento; nunca conseguido y que este autor nos refleja con pesadez abrumadora, llevándonos la novela ya en un hilo plenamente descriptivo hasta los albores de la revolución francesa, para la cual se ha pensado desarrolle un segundo libro de lo que pretende ser una trilogía que llegue hasta una actualidad paralela.
La obra, por el momento, ha cosechado un aluvión de críticas literarias e historiográficas, pero un indiscutible éxito de ventas. La polémica filiación política del autor, sus controvertidos artículos históricos y que haya tardado 17 años en culminar una novela anunciada desde que escribió su primera letra pueden ser algunas de las causas.
No puedo reprimir la tentación de reproducir las críticas del diario conservador francés le figaro y del progresista le monde. El primero tras anunciar largo tiempo la llegada de la novela, relegó el análisis de la misma a páginas interiores, donde el famoso crítico literario Henry Doulmass y el historiador Bruno Leperret macharon la obra con frases como: "una novela densa, aburrida, sin ritmo, carente del mínimo sentido estético. Un muro sin fin contra el que estrellar el intelecto varios meses seguidos; un aborto literario con profecías de best seller." o "No quiero entrar en la prosa de mi colega, me limitaré a la absoluta falacia de todos los supuestos en que asienta su obra, deploro el fingido carácter neutral un colega que se ha creído hasta los tuteanos la leyenda de que Dios era español". En Le Figaro sin embargo el análisis abría el diarío con un editorial de la casa donde hemos podido recoger frases como: "Un libro medieval, anterior a la imprenta en su estilo y anterior a la caverna de la que surgió el sapiens en sus conceptos." O "Un ataque de la más febril reacción política contra los principios básicos de la democracia, desde postulados teocráticos y con un odio cerval hacia la madre de la libertad".
Por los foros de internet se comenta que incluso el gobierno francés podría tener presiones para "jubilar" de su cátedra a Vollraig-Bleu o como ha pedido un dirigente de la LCR retirar la nacionalidad francesa al citado autor.
Un autentico lío en torno a una obra pesada pese a su interés que se ha convertido en una cuestión de estado en Francia, donde el excentrico catedrático ha parecido al fin quedarse absolutamente solo. Un libro que no recomiendo en definitiva para una lectura placentera, sino para un análisis paradigmático de las infinitas posibilidades que ofrece nuestro planeta y los caminos que hemos decidido seguir en nuestra evolución social como especie, una lectura dura, para los más desconsiderados, recomiendo muy vivamente que se abstengan de la misma y se dediquen a leer la mucha y muy divertida literatura que surgirá alrededor de este libro.
2 comentarios:
Soy de los que estuvo esperando la publicación de Capituló con verdaderas ansias... menuda decepción. Puedo decir que me entristece. Cuando llegué a la parte final, más o menos en torno a la página tres mil, me di cuenta de que luchaba conmigo mismo, de que estaba yendo contra natura por muchas ganas que tenga de leer la parte en la que llega a la actualidad, hecho que supongo que postergará a la tercera parte (a no ser que lo trate en el segundo y se atreva con un final en el año 4055 que incluya platillos y marcianos...). Y es que es justo la espectación que provoca ese último libro el que hace de esta saga un éxito difícl de explicar de otra manera. Decir que es pesado es poco. Yo diría que puede despertar el ansia asesina de cualquiera, por muy paciente que sea.
Eso, si, coincido con lo interesante que es la polémica que le circunda. No me extrañaría nada que le hundiesen profesionalmente aunque no se haga oficial, tal y como está la cosa le tocará emigrar (dicen que por allí le llaman "le espagnolite"), así que imaginate como está el asunto
Que pena. Y lo bien encuadernado que está.
No podemos negar el tostón que es el libro. A partir de la página 400 se hace demasiado lineal. Pero puedo decir que me he pasado casi tantas horas leyéndolo como investigando las reacciones y esto último está siendo realmente divertido.
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